Un Millar de Gambetas: La Premier, lo menos importante para el Liverpool

La mente de Jürgen Klopp se encuentra en París y en recuperar a los lesionados de cara al choque más importante de su año futbolístico ante Real Madrid, en la final de la Champions League.

Tal vez al técnico alemán le cayó “bien” el empate (con sabor a derrota) ante los Spurs hace dos semanas, puesto que vio un poco más lejos el posible título en su liga local, sintiendo menos presión por tener que pelear por todo casi al mismo tiempo. Días después, consiguió la FA Cup ante Chelsea, y ese resultado ante Tottenham caló un poco más en el afán por acaparar cuatro títulos en la temporada (tras la Carabao Cup, también conseguida ante los Blues).

Sin embargo, ¡oh sorpresa!, el fin de semana los de Pep Guardiola igualaron ante West Ham y las esperanzas volvieron, no tan intensas como hace cuatro jornadas, pero todo es posible en el futbol. Falta un solo partido de Premier League. Liverpool se mide a Wolves con la obligación de ganar y esperar un cuasi utópico tropezón de los ciudadanos ante Aston Villa.

Klopp ve tan complicado el título liguero, que no le importó este martes lanzar medio equipo suplente ante el Southampton. Un rival de poca jerarquía, de acuerdo, pero que lo complicó desde el inicio con un tanto tempranero. En su ofensiva estaban su cuarta (Jota), quinta (Firmino) y sexta (Minamino) opción al frente.

Así de poderoso es el plantel Red, donde el japonés fue clave en la igualada e incluso la séptima opción al frente, Divock Origi, fue el único que ingresó en el intento por sacar ese triunfo que se consiguió un tanto circunstancial por conducto de un rebote y “remate” de Matip.

Liverpool aún tiene esperanzas de dejar en ridículo el año del City y dejarlo con las manos vacías.

Por cierto, como simple dato, este drama británico en su último capítulo podrás seguirlo en vivo a través de Cadena W el domingo a las 10 am, digo, solo como consejo mediático.