Domingo de graduación, de consolidación y de reafirmación de que Sergio Pérez es uno de los mejores pilotos de toda la Fórmula 1. El mexicano pasó de ser 17 por un problema en su auto y terminó segundo en una remontada que quedará para la historia.

En una carrera de locos en el GP de la Gran Bretaña donde pasó de todo, el tapatío sumó puntos importantes en un día en elnquebRed Bull parecía se iba a quedar sin puntos. Max Verstappen tuvo también fallas en su monoplaza y apenas alcanzó a rescatar la séptima posición.

El día empezó con un accidente brutal del Guanyu Zhou, que salió volando apenas en la largada y se detuvo toda actividad por casi una hora. A la hora de relanzar, Checo se tocó con Leclerc y tuvo que ir a boxes a cambiar el alerón y pasó de cuarto a 17 y con todo cuesta arriba.

De a poco fue remontando posiciones, aprovechó algunas fallas por delante de él y cerca del final, cuando ya estaba cuarto, se le abrió la puerta con un Safety Car debido a un parón en el auto de Ocon.

Faltando 12 vueltas la carrera empezó casi de cero y en el arranque Pérez fue a por todo. Se defendió de Hamilton y de Sainz y quedó segundo a tiro de piedra de Carlos Sainz, que nunca bajo los brazos y así terminaron el circuito.

Palabras de Checo

Al final de la carrera y con una sonrisa en el rostro, Sergio Pérez se dijo satisfecho por su extraordinario trabajo y por darle puntos importantes a su equipo que sigue peleando en el campeonato de constructores.

“Fue una gran pelea, fue una gran remontada. Tuvimos la oportunidad al final y la aprovechamos. Pensé que tenía posición para ir a buscar el primero, pero Lewis y Charles también hicieron su trabajo”.