Del exilio al regreso, el caso de Renato Ibarra

Un 5 de marzo de 2020, el futbolista Renato Ibarra fue detenido por las autoridades de la Ciudad de México por haber golpeado a su esposa embarazada. Desde ahí, todo cambiaria en la historia del mediocampista americanista.

El ecuatoriano negó lo hecho a través de su cuenta oficial de twitter, aunque en menos de 24 horas fue detenido y llevado a un Ministerio Público al sur de la Ciudad de México. 
A la mañana siguiente, todo se complicaría en la carrera de Renato, ya que sería trasladado al Reclusorio Oriente.

Días después se filtrarían imágenes, videos y declaraciones de su esposa confirmando la situación, además que la ley lo señaló como “tentativa de aborto y feminicidio.”
Con el paso de las semanas los cargos serian retirados, pero el futbolista abandonaría el club América por decisión de la directiva y sería mandado a préstamo con el Atlas.

Con los rojinegros estuvo durante dos torneos donde participó en 27 duelos, dando cuatro anotaciones y demostrándose por más de 1800 minutos.

El 27 de mayo del presente año, Ibarra regresaría a las instalaciones de Coapa ya que los rojinegros no hicieron valida la opción de compra. En ese momento, la directiva fue clara y su postura fue de buscarle acomodo en otro equipo ya que no lo utilizarían en el nido.
Una serie de lesiones e infortunios por parte de las águilas, le daría la segunda oportunidad que nadie se hubiera imaginado.

Y después de 603 días desde su última participación con la casaca amarrilla que fue en la final de la apertura 2019, regresaría para anotar el segundo tanto para el América, después de 14,472 horas, el Coloso de Santa Úrsula, volvería a corear el nombre de Renato Ibarra.